Pac-Man World de 1999 es incluso mejor de lo que recordamos

Re-visitamos Pac-Man World de 1999 en un esfuerzo porque algún día el juego sea tan valorado como merece.

La perspectiva de los niños es peculiar. Los años pasaban tan lento que solo las vacaciones navideñas parecían una eternidad. Los dulces eran mil veces más dulces (¿hmm?) y nos volvían las criaturas más felices de la tierra. Y en general, toda pieza audiovisual tendía a revolucionar nuestro mundo debido a la poca variedad que habíamos experimentado.

Dicho esto, Pac-Man World siempre me pareció genial, con variedad de enemigos inigualable y dinámicas divertidas, pero jamás lo había vuelto a ver con atención, ya entrado en años.
Recientemente me di una vuelta por un gameplay de dos horas de este juego que tanto me obsesionó de niño, y mi sorpresa fue mayúscula.

Contrario a la mayoría de ocasiones, mi percepción no era errónea, pues definitivamente Pac-Man World es un juego excelente, pero no me había puesto a pensar que fácilmente estaba a la altura del Mario Bros. en turno.

Variedad de escenarios e imaginación apabullantes

Con seis mundos temáticos y cuatro niveles en cada uno, Pac-Man garantizaba decenas de horas de diversión. Escenarios de piratas, volcanes, viajes espaciales, casas embrujadas, fábricas, y la mansión de Toc-Man, así como secciones distintas en cada uno, te dejaban explorar dinámicas infinitas con villanos variados, sin dejar de lado los puzzles o rompecabezas que debías vencer para continuar.

El nivel de detalle y cuidado de cada etapa es sorprendente. No sientes estar recorriendo lo mismo con otras texturas, y las pruebas que te hará pasar cada escenario se adaptarán al mismo. Los obstáculos de la casa embrujada no son los mismos que en la playa pirata, sino que cambian para encajar perfectamente, y construir una atmósfera.

Los enemigos tienen también dicha característica cambiante, e incluso los que se repitan (fantasmas) tendrán divertidos disfraces para cada mundo.

Jugabilidad excelente y desafiante

Es increíble notar cómo un juego que hace tantos años me parecía complicado, hoy no deja de serlo.

Quizá la cámara es un poco caótica y ello sí podríamos recriminar, pero hay saltos de plataforma, villanos precisos, y lugares secretos que tardarás horas en dominar a la perfección. Terminar este juego al 100% es una hazaña que cualquier gamer (a cualquier edad) no tendrá nada fácil.

Además, las habilidades de Pac-Man y cómo armonizan con los escenarios es algo digno de ver. No solo era difícil para ese entonces, sino que incluso hoy en día es escaso. «Kirby and the forgotten land» de 2022 logra prácticamente lo mismo que este juego, y todos se lo celebramos sin descanso.

Historia y propuesta

No es que se definan los intereses o el trasfondo de Pac-Man. No lo vamos a ver humanizado en extremo ni conocer sus traumas de la infancia, pero en definitiva la mini-trama que desarrolla el juego se puede ver, e incluso se halla en perfecto balance para tratarse de un juego tan sencillo y dirigido a los niños.

Si comparamos la premisa de Pac-Man con Mario Bros. el paralelismo es evidente. No nos queda a deber nada, y sus desafíos, para la época, no le pedían nada a los del plomero.

Sería injusto contar el trabajo musical de los juegos originales aquí, pero tanto las canciones como los efectos hacen una ambientación maravillosa.

¿Por qué no es uno de esos clásicos intocables?

Porque la recepción del título fue mixta. Muchos «fanáticos» de la franquicia lo condenaron categóricamente por no respetar las pautas del material original, entiéndase: ser un laberinto con cuatro fantasmas y bolitas de comida.

La propuesta e innovación que los desarrolladores plasmaron aquí fue totalmente digna de un 20 aniversario, y la re-invención del personaje fue tan acertada que le dio rumbo a la saga. Es una pena que por un grupo de «puristas» esto no haya pasado a la historia, siendo que hace exactamente lo mismo que las vacas sagradas (Los «Marios»).

Nuestro yo del pasado no estaba equivocado, y es toda una experiencia ver con otros ojos aquello que nos parecía grandioso ¿Qué cosas apreciamos de manera diferente? ¿Qué cosas han cambiado? ¿El Gansito sabía mejor antes, o es porque crecimos?

Vayan a darse una vuelta por el gameplay mencionado. Es lo más cercano que tenemos si no queremos el suplicio de instalar un emulador como DuckStαtiοn. No podremos volver a jugarlo como niños, pero hacer el intento no hace daño.

Pac-Man World de 1999 es incluso mejor de lo que recordamos