Tony Takitani – Haruki Murakami (Reseña/Opinión)
Una reseña de Tony Takitani, el libro de Haruki Murakami tan breve como asombroso.
Llegamos al final de este inesperado mes de literatura japonesa con el primer libro de esta índole que llegó a mis prístinos ojos: Tony Takitani. Un pequeño libro que se quedará grabado en tu memoria por muchos años y quizá cambie tu manera de experimentar las relaciones personales.
Aún si no he leído tanto de la cultura nipona, quedaron varios títulos en mi lista de reseñas, así que si por azares del destino diste con esta pequeñísima colección de críticas, puedes esperar unas cuantas extra en el futuro próximo.
Haruki Murakami se ha convertido en el escritor asiático más popular en el mundo occidental, sin duda alguna. Por alguna extraña razón, millennials influyentes decidieron darlo a conocer a sus seguidores, y desde ello puedes escuchar conversaciones al respecto por parte de quienes jamás esperabas ver leyendo prácticamente lo que sea. Es pues, Tony Takitani la «novela» adecuada para comenzar a sumergirte en su trabajo, y ahora mejor que nunca, considerando su ascenso contemporáneo.
Ah, y si no será tu primer libro del tipo, te aseguro que cuando acabes te preguntarás dónde estuvo todo este tiempo.
Emocional y personal
Un hombre solitario con un deseo con el que cualquiera se puede identificar. Una serie de eventos afortunados que solo nos retratan un panorama positivo y nos llevan a cuestionar la fragilidad del mismo. Una historia con los pies en la tierra que todos podemos experimentar en algún momento pero que evoca sentimientos profundos de desesperanza y abatimiento.
La sustancia real de esta obra quizá está en su giro, pero la construcción de personajes y el camino a la revelación son invaluables. En unas cuantas páginas, Murakami es capaz de hacernos empatizar con Tony y cruzar los dedos para que todo le salga bien. Es una conexión rápida pero firme, y basada en las similitudes del personaje con el lector.
Narrativa y ritmo disfrutables
Sin inclinarse ni por la «historia» ni el «mensaje» detrás de ella, el escritor logra orillarnos a una reflexión muy especial pero no deja de lado a los personajes realistas y las situaciones terrenales que desencadenan aspectos vitales en la trama.
En otras palabras, Murakami sí quiere contarnos algo, y así lo hace, en lugar de recurrir a frases inconexas y literatura contemplativa; pero no por ello la moraleja se vuelve más superflua u obvia.
Es una obra tan profunda como agradable gracias al estilo de escritura, y será una montaña rusa de emociones para el espectador.
Casi spoiler: Sobre similitudes
Este libro es para oriente lo que «La tregua» de Benedetti para occidente. Una historia de obsesión y pérdida con algunas características que actúan como metáforas para la complejidad de los personajes. La muerte del ruiseñor simbólico de nuestros protagonistas y su recaída en la soledad. La eterna búsqueda por una razón de ser.
Es difícil experimentar a este grado fuera de la literatura. Una historia, por más breve que sea, con giros y desolación de personajes como los presentes, va a desencantar al espectador, porque a pesar de que anhelamos obras reflexivas no queremos que nos hagan tanto daño.
La herencia de esta obra (y algunas otras de Murakami) es una visión ecuánime de las relaciones personales, y son material que no le vendrá nada mal a cualquier lector, teniendo en cuenta cuándo hay que detenerse, porque tampoco se trata de ponernos reiterativos.
Es imprescindible y fácil de leer. Tiene que encabezar tu lista de pendientes.
Tony Takitani – Haruki Murakami (Reseña/Opinión)